¡ÚLTIMA HORA! Antonio Sivera, portero del Deportivo Alavés, ha soltado la bomba del fin de semana tras la derrota 1-3 ante el FC Barcelona en el Spotify Camp Nou. El guardameta albiazul no se cortó ni un pelo en zona mixta y dejó una frase que ya está dando la vuelta a toda España.
“Llevo muchos años en Primera División, he parado a los mejores del mundo, pero jamás, repito, jamás me había enfrentado a un jugador tan salvajemente peligroso como él”, declaró Sivera visiblemente afectado, todavía con el sudor del partido en la frente y la respiración agitada.
Muchos pensaron automáticamente en Lamine Yamal, el adolescente que volvió loca a toda la defensa alavesa con sus regates imposibles. Otros señalaron directamente a Dani Olmo, autor de un doblete letal que remontó el encuentro en apenas quince minutos de locura culé.
Pero no. Sivera negó con la cabeza cuando le preguntaron por ellos. “Ni Yamal ni Olmo. Es otro. Es alguien que nadie esperaba que me hiciese tanto daño”, añadió el meta, apretando los dientes mientras recordaba cada una de las tres dianas encajadas.
La sorpresa llegó al final del partido. Cuando sonó el pitido final, el propio Antonio Sivera se acercó al autor de su pesadilla personal y, sin dudarlo, le pidió la camiseta.
Los cámaras de DAZN captaron el momento: el portero albiazul, con cara de rendición absoluta, intercambiando su elástica con la estrella blaugrana.
Ese jugador que le hizo vivir un infierno no fue otro que Robert Lewandowski. Sí, el polaco de 37 años que muchos daban por acabado y que ayer firmó una actuación brutal: un golazo de cabeza, una asistencia de killer y una presión asfixiante que desquició por completo al Alavés.
“Es un animal. Corre como si tuviera 25 años, presiona como un loco y define como los dioses. Pensé que ya lo había visto todo, pero Lewy me dio una lección de fútbol y de hambre”, confesó Sivera, que no pudo evitar sonreír con admiración al recordar el duelo.
El cancerbero vitoriano detalló cómo Lewandowski le ganó la espalda en el primer gol, cómo le obligó a salir mal en el segundo y cómo le rompió con un movimiento de nueve puro en el tercero. “Me destrozó físicamente y mentalmente.
Por eso le pedí la camiseta, porque tipos así hay muy pocos”.
La prensa catalana ya calienta el próximo Clásico diciendo que Lewandowski está en el mejor momento de su etapa blaugrana. En Vitoria, en cambio, los aficionados del Alavés todavía no se creen cómo un delantero “de la vieja escuela” pudo hacer tanto daño en 2025.
Sivera terminó su comparecencia con una frase que resume la noche: “Puedes prepararte para Yamal, para Olmo, para Raphinha… pero cuando aparece Lewandowski en este modo depredador, no hay plan que valga. Es el mejor ‘9’ que he enfrentado nunca”.
El vídeo del momento en que Sivera pide la camiseta a Lewy ya supera los 8 millones de reproducciones en TikTok y se ha convertido en tendencia mundial con el hashtag #SiveraRindePleitesía. Hasta el propio Lewandowski respondió en Instagram con un simple “Respeto máximo, crack 🤝”.
Mientras el Barça celebra el liderato provisional, en Mendizorroza siguen lamiéndose las heridas. Pero incluso en la derrota, Antonio Sivera se ganó el respeto de todo el fútbol español por reconocer públicamente la grandeza de un Robert Lewandowski que, a sus 37 años, sigue siendo el terror de las áreas.
Y así, con una camiseta blaugrana guardada como tesoro en su taquilla, Sivera cierra el capítulo más duro –y a la vez más bonito– de su carrera en Primera División. Porque hay derrotas que duelen… y hay derrotas que enseñan quiénes son los verdaderos reyes del fútbol.
Mientras el Barça celebra el liderato provisional, en Mendizorroza siguen lamiéndose las heridas. Pero incluso en la derrota, Antonio Sivera se ganó el respeto de todo el fútbol español por reconocer públicamente la grandeza de un Robert Lewandowski que, a sus 37 años, sigue siendo el terror de las áreas.
Y así, con una camiseta blaugrana guardada como tesoro en su taquilla, Sivera cierra el capítulo más duro –y a la vez más bonito– de su carrera en Primera División. Porque hay derrotas que duelen… y hay derrotas que enseñan quiénes son los verdaderos reyes del fútbol.
Mientras el Barça celebra el liderato provisional, en Mendizorroza siguen lamiéndose las heridas. Pero incluso en la derrota, Antonio Sivera se ganó el respeto de todo el fútbol español por reconocer públicamente la grandeza de un Robert Lewandowski que, a sus 37 años, sigue siendo el terror de las áreas.
Y así, con una camiseta blaugrana guardada como tesoro en su taquilla, Sivera cierra el capítulo más duro –y a la vez más bonito– de su carrera en Primera División. Porque hay derrotas que duelen… y hay derrotas que enseñan quiénes son los verdaderos reyes del fútbol.
