La polémica alrededor de la última convocatoria de la selección española ha tomado un giro inesperado después de que Pau Cubarsí, la joven promesa del FC Barcelona, realizara unas declaraciones que nadie había anticipado. Según afirmaron varios medios deportivos, Cubarsí habría señalado directamente a Fran García, lateral del Real Madrid, afirmando que “él no merece llevar la camiseta de la selección española”. Estas palabras no solo generaron un gran revuelo en redes sociales, sino que también provocaron una reacción inmediata desde el vestuario blanco.

Todo comenzó cuando Luis de la Fuente anunció la lista oficial para la ventana internacional de noviembre. Para sorpresa de muchos, el seleccionador decidió incluir a Fran García, quien había tenido una temporada marcada por altibajos pero también por una notable evolución en su rendimiento durante las últimas semanas. La ausencia de Cubarsí, en cambio, fue interpretada por algunos aficionados culés como una injusticia, considerando la progresión meteórica que el joven defensor ha tenido con el Barcelona.
Las declaraciones atribuidas a Cubarsí no tardaron en viralizarse: una frase contundente, directa y, para muchos, innecesariamente dura. Aunque el jugador azulgrana no profundizó en sus afirmaciones, la tensión se disparó de inmediato dentro del entorno mediático. Los debates televisivos se dividieron entre quienes defendían al canterano del Barça y quienes señalaban que un futbolista tan joven debe mostrar mayor prudencia al hablar de sus compañeros de profesión.
Sin quedarse callado, Fran García decidió responder públicamente, pero lo hizo de una manera sorprendentemente calculada y madura. No recurrió a ataques personales ni a ironías, sino que presentó lo que él llamó “cinco razones objetivas” por las que consideraba justa su convocatoria. Entre ellas mencionó su disciplina táctica, su capacidad para adaptarse a distintos perfiles ofensivos, su progresión defensiva en el uno contra uno, su compromiso constante con el equipo y, finalmente, su experiencia reciente compitiendo en partidos de alta exigencia tanto en La Liga como en Champions League.
La respuesta del lateral madrileño tuvo un impacto inmediato. Muchos aficionados valoraron su serenidad y su enfoque profesional, especialmente al evitar cualquier provocación hacia Cubarsí. Esta actitud fue interpretada como un signo de madurez que, según varios analistas, también explica por qué Luis de la Fuente confía en él para el proyecto de la selección.
Poco después, el propio seleccionador decidió intervenir para aclarar la situación. De la Fuente afirmó que la convocatoria se basaba en criterios estrictamente deportivos y en las necesidades actuales del equipo. Reconoció públicamente el buen rendimiento de Cubarsí, pero recordó que “la selección no es una recompensa, sino una responsabilidad”, subrayando que la elección de jugadores se hace pensando en el equilibrio colectivo y no únicamente en el talento individual.

El técnico también elogió el comportamiento de Fran García, destacando su profesionalidad y su capacidad de afrontar la presión mediática. Según él, estas características pesan tanto como el rendimiento en el campo, especialmente en un puesto tan exigente como el lateral.
Mientras la polémica sigue generando conversación, queda claro que este episodio revela dos cosas fundamentales: la enorme competencia interna que vive actualmente el fútbol español y la presión que recae sobre los jóvenes talentos que ascienden rápidamente al primer nivel. Tanto Fran García como Pau Cubarsí representan el futuro del deporte, y aunque este choque verbal haya causado cierta tensión entre aficiones, para muchos analistas es simplemente parte del proceso de crecimiento y madurez que todo jugador debe atravesar.