💥 “Ya no gritó, golpeó la mesa” – La explosión silenciosa de Hansi Flick tras el partido contra el Celta
La calma de Hansi Flick tiene límites. Y el domingo por la tarde, tras la victoria del FC Barcelona contra el Celta de Vigo (4-2), el técnico alemán, según varios testigos,Perdió el control durante varios minutos en el vestuario., desencadenando una escena de rara intensidad. Detrás de las sonrisas oficiales y las palabras mesuradas a los medios se esconde una tensión creciente en las entrañas del temporal Camp Nou.

Todo empezó después de la rueda de prensa, cuando un miembro del personal informó a Flick que un jugador -cuyo nombre no ha sido revelado, pero del que muchos sospechan que es un ejecutivo de la defensa-Habría sido irónico sobre sus instrucciones tácticas.durante el partido. Según una fuente interna, el técnico alemán reunió entonces a todo el vestuario y golpeó violentamente la mesa, gritando: “¡Si alguien aquí piensa que jugar en el Barcelona es una afición, que se vaya ya!”. » Una frase gélida, pronunciada en medio de un pesado silencio, que habría congelado a todos, incluidos Lewandowski y De Jong.

La escena duró menos de dos minutos, pero sus ecos siguen resonando. Algunos jugadores habrían visto esta explosión como un signo de fatiga mental por parte de Flick, ya bajo presión después de varias semanas marcadas por rumores de desacuerdo con Laporta y Deco. Otros, por el contrario, habrían acogido con agradouna reacción necesaria, recordando que el Barça “no necesita amigos, sino soldados”.
Según las indiscreciones transmitidas porEl Nacional, según se informa, la dirección convocó una reunión de emergencia el lunes por la mañana para “calmar los ánimos” y evitar filtraciones adicionales a la prensa. Un amigo íntimo del presidente Laporta confiesa: “Joan respeta a Flick, pero no tolerará un vestuario dividido. »

Durante este tiempo, Lamine Yamal habría publicado un enigmático mensaje en sus redes sociales:“El fuego purifica el hierro. »Lo suficiente como para inflamar aún más las especulaciones sobre un posible malestar entre jóvenes y ejecutivos.
Hansi Flick guarda silencio. Cuando un periodista alemán le preguntó si realmente había golpeado la mesa, él se limitó a sonreír discretamente: “He golpeado fuerte, sí. Pero sólo en el suelo. »
Los días que se avecinan prometen ser calurosos en el Barça, donde la victoria ante el Celta puede haber costado más de lo que parece. Porque detrás de la imagen de un equipo triunfante surge una duda:¿Y si la verdadera pelea de Flick ya no fuera en el campo, sino dentro de su vestuario?
Fuente: elaboración propia de varios medios españoles y testimonios internos.